CRÍMENES DE GUERRA

Este texto nos muestra un fragmento del libro Crímenes de guerra en Vietnam escrito por Bertrand Rusell en 1967.
Rusell (1872-1970) fue un filósofo inglés conocido, entre otras cosas, por su influencia en la filosofía analítico y su activismo social. Fue ganador de un Premio Nobel de Literatura en 1950. Durante la Primera Guerra Mundial, Bertrand fue pacifista y publicó artículos a favor de la paz, lo que le llevaría a pasar seis meses en prisión. Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, pasó del pacifismo a mostrar un apoyo claro a las fuerzas armadas contra el ejército nazi.
El texto nos habla de la fatal Guerra de Vietnam (1955-1975). Vietnam estaba dividida en Vietnam del Norte, con un régimen comunista,  y Vietnam del Sur, con una dictadura. además, en Vietnam del Sur había una guerrilla, el Vietcong, en la que el régimen nortvietnamita amenazaba con sustituir el Gobierno, pero Vietnam del Sur estaba siendo apoyado por Estados Unidos, y lo que realmente se intentaba era que el régimen comunista no se extendiese por el resto de Asia. En 1964, Estados Unidos decidió atacar, aunque esto no les sirvió de mucho, ya que Vietnam del Norte utilizada tácticas guerrilleras con las que tomaron la ventaja. Finalmente, en 1975, tanto Vietnam del Norte como Vietnam del Sur se unan formando así la República Socialista de Vietnam.
En el texto lo que el autor nos quiere transmitir es su total desacuerdo hacia esta guerra y, como el fragmento está escrito durante la guerra de Vietnam, da su opinión sobre que si la guerra sigue así, China y la Unión Soviética se acabarán metiendo en contra de Estados Unidos. También habla de que se utilizaron muchísimas armas, quizás demasiadas (recordemos que Rusell era pacifista). De alguna manera, el autor da un toque de atención a movimientos y rebeliones pacifistas para que actúen y protesten por esta atrocidad.
Por último, el autor hace referencia a que esta guerra fue, sin duda, una guerra sin sentido y en la que las grandes potencias, como es el caso de Estados Unidos, no se debería haber metido.